Última isla de nuestro viaje a El Hierro, Fuerteventura y Lanzarote
Resumiendo brevemente el inicio de este viaje, por si no habéis leído las anteriores entradas, dedicadas a la isla de EL HIERRO y a FUERTEVENTURA aquí os hago un pequeño resumen: Decidimos aprovechar nuestro viaje a El Hierro para conocer también la Isla de Fuerteventura y además volver a visitar Lanzarote. Para ello entramos en la web de Vueling, donde adquirimos un vuelo a Tenerife Norte de ida y para el regreso un vuelo de Lanzarote a Barcelona. Para los vuelos interinsulares de Tenerife Norte a El Hierro y de El Hierro a Lanzarote los contratamos con Binter.
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Cómo llegar a Lanzarote
Pues en nuestro caso como veníamos de la isla de El Hierro, llegamos en un vuelo de la compañía Binter con escala en Tenerife Norte. Si se viene desde la península, hay vuelos directos que parten de Barcelona o Madrid con la compañía Vueling a precios realmente interesantes.
Cómo moverse por Lanzarote, la mejor solución alquilar un coche
Como expliqué en las anteriores entradas, valoramos las varias opciones, entre las empresas más conocidas con AutoEurope y las locales de las Islas Cicar o Pluscar, al final nos decidimos por Cicar, que ofrecía unos precios más interesantes en comparación, aunque la experiencia con ellos no fue todo lo satisfactoria de los esperado.

Algunos datos sobre Lanzarote
Es la isla de las Canarias favorita de mi pareja, quizás la más variada en cuanto a fenómenos naturales y construcciones hechas por la mano del hombre, bueno casi se podría decir más concretamente por la mano o las ideas de César Manrique, un artista a la hora de aprovechar lo que ha moldeado la naturaleza para adaptarlo a encantadoras viviendas, miradores, piscinas, etc.

Fue declarada el 7 de octubre de 1993 Reserva de la Biosfera por la UNESCO en toda la totalidad de la isla, algo bastante inusual. Uno de los paisajes más destacados es el del Parque Nacional Timanfaya creado por las erupciones volcánicas de la década de 1730.
El nombre de la isla es gracias al marino genovés Lanceloto Malocello, que visitó la isla en 1330 con su expedición realizando los consiguientes mapas cartográficos.
Es la cuarta isla más extensa del archipiélago, con una superficie de 850 kilómetros cuadrados, siendo también conocida como «la isla de los volcanes», tiene su capital en Arrecife de unos 65.000 habitantes.
Donde alojarse en Lanzarote
Decidimos dividir la visita de isla en dos partes, reservando primero un alojamiento con booking en el Norte, concretamente en la población de Punta Mujeres en los apartamentos llamados La Casa de las Salinas que están en la calle las Salinas, 6, de Punta Mujeres, con teléfono: +34 659 71 37 28, un conjunto de tres apartamentos, que son unas antiguas casas de pescadores reconvertidas en apartamentos, situadas frente a las piscinas naturales de Las Rosas, están muy bien acondicionados, el único inconveniente era que solo tenia una pequeña ventana alta frente al mar.


En el Sur reservamos a través de AIRBNB un apartamento en la población de El Golfo llamados Sol & Mar en la avenida Marítima, 13, situados a una calle del océano, también era una antigua casa reconvertida en un encantador apartamento, en esta ocasión la ventana daba a una calle estrecha.



Llegada a Lanzarote procedentes de el Hierro
Una vez desembarcamos, nos dirigimos a la oficina de Cicar, que está gestionada en la isla por la empresa Cabrera Medina, para recoger nuestro coche de alquiler, en esta ocasión había solicitado un Fiat 500X, pero me volvieron a dar, al igual que en el Hierro, un Opel Mokka, a ver yo entiendo que ponen tal coche o similar, pero opino que deberían de esforzarse más en entregar el coche solicitado, pues de los tres coches que utilicé ninguno fue el solicitado a la empresa Cicar, para eso creo es más realista que no los ofrezcan si no los tienen disponibles.

Bueno, no me enrollo con el tema del coche, salimos del aeropuerto dirección Punta Mujeres que es donde habíamos reservado el apartamento para esta primera estancia en la isla, un coqueto apartamento frente al mar, que estuvo realmente bien a pesar de su escueta ventana.



Como ya era tarde, paseamos por la antigua población pesquera mientras buscábamos donde podíamos cenar, en un principio teníamos pensado hacerlo en un bar restaurante que esta frente a las Piscinas Naturales llamado Bar La Piscina «Pichón», pero nos encontramos con su propietario sentado en una banco frente al bar y nos dijo que como tenia mucha faena al mediodía ya no pensaba abrir por la noche, aconsejándonos ir al Restaurante Tahoyo situado a casi un kilometro en la calle Pared del Agua, 14, que era uno de los pocos que abren por la noche, comimos unos sabrosos piquillos con atún y un pulpo frito. Tras la cena nos fuimos a descansar que ya tocaba.



Día 1 – Órzola | Haría | Caleta de Famara
A pesar de que el día amaneció bastante nublado, decidimos seguir con nuestro plan de recorrer algunas playas de la parte Norte de Lanzarote, además tampoco íbamos con la intención de bañarnos.
Saliendo de Punta Mujeres Iniciamos la ruta de las calas siguiendo la carretera LZ-1 en dirección a Órzola, la primera playa que nos encontramos fue la Caleta del Mero, en la que se tiene que aparcar en una explanada al lado izquierdo de la carretera, una vez cruzamos dicha carretera, bajamos por un camino un poco irregular y en unos 100 metros llegamos a la playa de arena blanca bordeada de espigones de lava.

Siguiente parada la hicimos en la Cala de Las Rositas-Yé, que también dispone de un aparcamiento en el lado opuesto de la carretera, el acceso se realiza por un camino más fácil a través de pequeñas dunas de arena hasta llegar a la orilla, también es de arena fina blanca con algunas piedras a la entrada del agua.


La más bonita de todas, que nos encantó a ambos fue el Caletón Blanco, se puede acceder con el coche pudiendo aparcar justo al lado de la playa muy cerca de la orilla, lo que me hace suponer que en una época normal debe estar a rebosar de gente, actualmente entre que estamos en pandemia con el añadido que fuimos muy temprano apenas éramos cinco coches y alguna motorhome en el aparcamiento. La playa es espectacular, de arena fina blanca con sus aguas turquesa que entran como en un pequeño fiordo de roca volcánica lo que provoca que apenas cubra hasta pasados casi 50 metros.

Visitamos la población de Órzola, conocida principalmente porque desde esta localidad es desde donde salen los ferrys hacia la isla La Graciosa, una opción que valoramos pero la descartamos porque preferimos seguir visitando Lanzarote.

Por si os interesa visitar la isla aquí os dejo el enlace del Ferry : https://www.civitatis.com/es/lanzarote/ferry-isla-la-graciosa/?aid=11064


En Órzola recorrimos un poco las callejuelas de la villa, pero tampoco es de las más bonitas. Nos acercamos hasta la playa de la Cantería, una playa, según nos contaron, frecuentada por los surfistas, pero cuando estuvimos nosotros no había ninguno, en esta playa está prohibido el baño, pues hay bastantes corrientes.

Mirador del Rio
Situado a unos 10 kilómetros de Órzola, se encuentra uno de los miradores más espectaculares de Lanzarote, el Mirador del Rio, diseñado por César Manrique en 1974 sobre un acantilado a 400 metros de altura, en el llamado Risco de Famara



Dispone de un amplio aparcamiento para turismos y autobuses. En la taquilla nos ofrecieron la posibilidad de comprar el bono de 6 Centros Turísticos, con un descuento interesante, como teníamos la intención de visitarlos todos, no lo dudamos y adquirimos el bono, tiene un precio de 35€ por persona.


Al entrar al mirador nos recibió un amplio pasillo de eminente estilo Manrique, de color blanco inmaculado estupendamente integrado en la roca, pero lo mejor son la espectaculares vistas desde sus impresionantes ventanales de cristal, llamados los ojos del mirador desde donde se dispone de una panorámica de La Graciosa junto los demás islotes que forman el Parque Natural del Archipielago Chinijo.





Se puede subir a la atalaya a través de una escalera de caracol que sale del salón principal, así variar un poco la perspectiva de las vistas, en la parte de abajo del risco se pueden observar las Salinas del Río con sus cocederos de colores rojizos, son las las más antiguas del archipiélago canario.

Haría
Satisfechos con la visita al maravilloso mirador, salimos con destino Haría, una bella población encalada de blanco, que además tiene el privilegio de albergar la Casa Museo de Cesar Manrique, que fue donde nos dirigimos en primer lugar pero nos encontramos con la desagradable sorpresa que no abrían hasta el 28 de Junio, así que lo dejamos para el último día que estaríamos en la isla, que por suerte coincidió que era el día 28.

Visitamos la población que llaman el «valle de las mil palmeras», debido al palmeral que la rodea, en la que destaca la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación, la plaza León y Castillo, el Museo De Arte Sacro y el Obispado Diócesis De Canarias.






Entre unas cosas y otras había llegado la hora de comer, así que decidimos dejarnos aconsejar por las sugerencias del anfitrión del apartamento en el que nos aconsejaban el restaurante Puerta Verde, situado en la calle Fajardo, 24. Aunque no habíamos reservado, tuvimos la suerte de conseguir mesa. La comida estuvo muy bien presentada, original y sabrosa, aunque los precios son quizás un poco altos.




Nos pusimos otra vez en marcha, parando para hacer unas fotografías a la iglesia de Yé.

Posteriormente nos acercamos al Mirador de Guinate, que a pesar de no ser muy conocido, dispone de buenas vistas del acantilado con la costa occidental de La Graciosa .

Caleta de Famara
Al llegar a la Playa de Famara, coincidió que estaba subiendo la marea, momento ideal para que los surfistas puedan disfrutar más de las olas, supongo que fue la causa de la dificultad en aparcar pues estaba repleto de coches.

El paisaje es una preciosidad, con la amplia playa de arena dorada que tiene una longitud de cinco kilómetros, protegida por el macizo montañoso del mismo nombre, mientras los surfers estaban esperando su ola ideal, según he leído es la playa más al noroeste de la isla.

Con el coche nos acercamos a la población de Caleta de Famara, la cual tiene la mayoría de calles de arena, recordándonos bastante a cuando visitamos el Rocío en Huelva, al tener tantos aficionados al surf, windsurf y kitesurf, hay varias tiendas especializadas y bares dedicados para ellos en la calle principal, pero si buscáis algo más tranquilo tan solo hay que ir al paseo marítimo.

A pocos kilómetros de la población nos encontramos con la Playa de San Juan, más salvaje y tranquila que la de Famara, la zona de arena está rodeada de rocas volcánicas formando una cala, cuando estuvimos en ella tan solo había una pareja con un perro.



De regreso a nuestro apartamento en Punta Mujeres hicimos una pequeña parada en las afueras de el Mojón donde se encuentran unas curiosas formaciones rocosas a orillas de la carretera, llamado Barranco de las Piletas y que debido a la erosión están moldeadas creando curiosas formas.
Una vez en Punta Mujeres fuimos a comprar en el único supermercado que encontramos abierto y cenamos en el apartamento.
Día 2 – Jameos del Agua | Villa de Teguise | Costa Teguise
Tras desayunar en el apartamento, decidimos visitar la población de Punta Mujeres ya que hacía un día esplendido, recorrimos todo su casco antiguo y el paseo marítimo frente al océano, realizando varias tomas de vídeo y fotografías, de paso hacíamos tiempo mientras llegaba la hora de apertura de los Jameos del Agua.




Jameos del Agua
Llegamos un cuarto de hora antes de la apertura, pero ya nos dejaron pasar, presentamos nuestro bono e iniciamos la visita de este precioso y mágico lugar.

Es impresionante el trabajo de César Manrique, como supo moldear esta obra de la naturaleza transformándola lo justo para crear un espacio tan alucinante. Al bajar las escaleras llegamos al sorprendente túnel volcánico con su laguna interior, donde habitan los famosos cangrejos albinos endémicos de la isla.






Al final del túnel se encuentra el restaurante y subiendo unas escaleras llagamos a una piscina de fondo blanco con aguas turquesas frente a la entrada del auditorio, del cual dicen es único en el mundo por sus características geológicas y condiciones acústicas.

Villa de Teguise
Al salir de los Jameos del agua nos dirigimos hacia la Villa de Teguise, fundada en 1414, fue la capital de la isla desde el siglo XV hasta 1852, la cual conserva varias edificaciones de gran valor histórico, como el castillo de Santa Bárbara, que ahora es el Museo de la Piratería, al intentar visitarlo nos encontramos con un letrero que decía estaban de reformas por lo tanto no se podía visitar; el Palacio Spínola del siglo XVIII, la iglesia de Guadalupe y el convento de San Francisco.






Según mi opinión es una de las villas con más encanto de Lanzarote, al llegar aparcamos cerca de la Iglesia de Guadalupe, recorriendo todo el centro histórico peatonal, con sus preciosas calles adoquinadas y edificios coloniales , nos encantó.
Jardín de Cactus
Como faltaba todavía un par de horas para comer, nos dirigimos hacia el Jardín de Cactus, la última obra en la Isla creada por César Manrique, instalado en una antigua cantera que transformó en un hermoso jardín con más de 450 especies de cactus, alrededor de este se encuentra la mayor plantación de tuneras de la isla dedicada al cultivo de la cochinilla.






Para comer regresamos a la Villa de Teguise, donde habíamos reservado a través de la app The Fork antes llamada «el tenedor», en el restaurante El Recoveco, donde comimos unas excelentes tapas, que incluían lapas, un surtido de quesos locales, champiñones rellenos de queso, rabas, papas arrugadas, pimientos de padrón, secreto ibérico con sal de escamas y de postre un delicioso pastel Chajá, originario de Uruguay. En resumen un restaurante muy recomendable en cualquier visita a Teguise.






Nazaret
Salimos en dirección a la población de Nazaret, para visitar la que fue la casa de Omar Sharif llamado Museo Lagomar, pero nos encontramos que estaba cerrada, suponemos por causa de covid 19, por lo menos pudimos verla desde fuera. Según cuentan la compró en el año 1973 cuando estaba en la isla rodando la película La Isla Misteriosa, pero en la fiesta de inauguración se enzarzó en una partida de cartas perdiendo la casa en una apuesta. La casa fue diseñada por César Manrique en colaboración de Jesús Soto.

Al no poder visitar el Museo Lagomar disponíamos todavía de tiempo y como tenia curiosidad por recorrer la Isleta de La Santa, donde se construyó en los años 70 un centro turístico llamado El Club La Santa para el turismo danés, fuimos hacia allí, recorriendo la zona costera y viendo desde el exterior las lagunas del club.



Costa Teguise
Finalizamos las visitas del día en Costa Teguise un centro turístico, donde habíamos estado hace ahora 35 años, irreconocible como podéis imaginar, hoy en día es una zona de masificación hotelera, estilo Salou o Lloret, con parques acuáticos, decenas de restaurantes, tiendas y urbanizaciones playeras, a nosotros personalmente no nos gustan demasiado estas zonas tan explotadas turísticamente.

Más aun viniendo de El Hierro, incluso nos agobió un poco, así que hicimos un breve recorrido por el paseo frente al mar en la playa de las Cucharas y nos marchamos hacia la tranquila Punta Mujeres de regreso al apartamento donde cenamos.
Día 3 – Cueva de los Verdes | Volcán Corona | Arrecife

Como teníamos previsto visitar a primera hora la Cueva de los Verdes, abrían a las 10h., hicimos un poco de tiempo recorriendo la población costera de Arrieta, en sus orígenes fue un fondeadero de pescadores, debe su nombre a Jean Henry d’Arriete Prud’homme , que fuera gobernador de Lanzarote y Fuerteventura.



La población está construida de espaldas al mar, es curioso que la parte trasera de todas las casas es la que da al mar, totalmente al contrario de como las construiríamos en la actualidad, que primamos las vistas al océano. Recorrimos la calle principal hasta llegar a la Playa del Charcón pasando de regreso por la encantadora Ermita de Nuestra Señora del Carmen.

Cueva de los Verdes
Llegamos a la entrada de la Cueva de los Verdes cinco minutos antes de su apertura, al acceder a la entrada nos hicieron esperar unos diez minutos para reunir un grupo para la primera visita del día.

El recorrido por el tubo volcánico formado hace más de 5000 años es espectacular, tiene una longitud total de siete kilómetros desde el volcán de la Corona hasta la costa, pero apenas se visita una pequeña parte.



El nombre le fue dado porque los propietarios de las tierras donde se encuentra la cueva se llamaban «Verdes», también fue utilizada por la población local para refugiarse de los ataques de corsarios berberiscos.

La visita tuvo una duración de 45 minutos , atravesamos varias de sus cavidades, siempre acompañados de las explicaciones de la guía, dejando la sorpresa que tienen reservada a los visitantes para el final del recorrido, que no voy a desvelar aquí, en mi caso era lo que más recordaba de nuestra primera visita de hace 35 años atrás porque me sorprendió muchísimo.


Una vez finalizada la visita, regresamos a la Caleta Blanca porque quería hacer unas fotografías con sol , ya que el día anterior cuando la visitamos estaba bastante nublado.
Volcán Corona
A continuación nos fuimos hacia la población de Ye para hacer un trekking hasta el cono del Volcán Corona, es un recorrido de una hora y media entre la ida y la vuelta, el camino era bastante llano cruzando varias zonas de viñedos, excepto los últimos 10 minutos que fueron en subida con el terreno de roca suelta, pero es relativamente fácil para todos los niveles.


Las vistas desde la ladera, tanto al interior del cono volcánico como a los alrededores, son impresionantes, me extraña que no sea una excursión más popular, os la recomiendo si algún día viajáis a Lanzarote.





Arrecife
Teníamos la intención de pasar la tarde en Arrecife, por lo que pusimos rumbo a hacia la capital de la isla, llegamos a la hora del almuerzo, nos recomendaron comer en el restaurante «el Almacén«, pero tuvimos la desagradable sorpresa de que estaba cerrado, así que decidimos comer en un restaurante frente al paseo marítimo, se llama La Rústica, (www.restaurantelarustica.com) los platos son generosos y de estilo turístico.


Con las energías renovadas nos dispusimos a visitar la ciudad, empezando por el Castillo de San Gabriel, para ello atravesamos el Parque José Ramírez Cerdá, donde nos hicimos unas fotografías en el Quiosco de la Música, cruzamos por el Puente de las Bolas construido en el siglo XVI, hasta el castillo, donde hay el museo de historia , actualmente cerrado por el covid.

Pasamos frente a la Iglesias de San Ginés construida sobre los terrenos de una antigua ermita del año 1630, pero estaba cerrada, muy cerca de la iglesia nos encontramos con el Charco de San Ginés, que en aquel momento a causa de la marea baja tenia bastantes embarcaciones apoyadas en el fondo seco, fue el primer puerto de la ciudad.






Nos pareció buena idea ir hasta el Castillo de San José andando, pero mi recomendación es que vayáis en coche, más aún si es primera hora de la tarde como fue nuestro caso, no hay ni una sombra en todo el camino además no hay nada interesante entre medio, bueno si , hay la nueva Marina de Lanzarote, pero en las condiciones actuales de pandemia no había nada.

El Castillo de San José construido en 1779, se sitúa frente a la bahía de los mármoles. En la actualidad es el Museo Internacional de Arte Contemporáneo, así que para poder visitar su interior no hay más remedio que acceder a las exposiciones de arte moderno, una ubicación curiosa para exponer piezas de arte tan diferentes con el edificio tan antiguo. En la planta baja nos encontramos con un restaurante diseñado por César Manrique con unas excelentes vistas al puerto.




De regreso al centro paseamos un poco más por el casco histórico , pasando por el antiguo Cabildo llamado la casa amarilla, la calle real y la calle Unión, hasta llegar a donde habíamos aparcado nuestro coche.


Por último nos acercamos con el coche hasta la Playa del Reducto de arena dorada, tiene medio kilómetros longitud y está protegida por un arrecife que se puede ver cuando hay marea baja.

Regresamos a Punta Mujeres para disfrutar de nuestro apartamento.
Día 4 – Playa Blanca| Playa de Papagayo | El Golfo
Tocaba levantarnos temprano para llegar con tiempo a Playa Blanca donde nos esperaba nuestro ferry con destino a Fuerteventura, aquí pasaré directamente al día que regresamos a Lanzarote.
Desde Punta Mujeres hasta Playa Blanca tardamos una hora aproximadamente, gracias a que como era bastante temprano apenas había tráfico.
Playa Blanca
Recorrimos toda la avenida marítima desde el puerto hasta llegar a la playa Dorada, unos tres kilómetros entre ida y vuelta, contemplando los preciosos paisajes que nos ofrecía la costa sur de Lanzarote.


En Playa blanca, nos aconsejó el anfitrión del apartamento de Fuerteventura que fuéramos a comer al restaurante Brisa Marina, situado en la avenida marítima, 99, está regentado por Juan Majorero. Nos comimos un pez llamado Pampano que nos recomendó el camarero, nos explicó que estaba elaborado primero a la plancha y terminado en el horno, acompañado de patatas panaderas, realmente delicioso. Un restaurante muy recomendable con preciosas vistas a la bahía, Aquí os dejo el enlace : http://restaurantebrisamarina.es/




Tras la comida recorrimos con el coche las principales playas que teníamos en las inmediaciones, pero antes pasamos por Marina Rubicón, un puerto deportivo diseñado con un encanto especial, repleto de edificios de color blanco y pasarelas que cruzan sobre el agua, pero supongo que a causa de la pandemia estaba casi desierto.


Playa de Papagayo
Desde la marina sale la pista para ir a la famosa Playa de Papagayo, que está a unos 8 kilómetros de la marina por pistas de tierra en buen estado, esta considerada la mejor de isla con su arena dorada, y aguas de color turquesa, junto a esta se encuentra la playa Mujeres y la playa del Pozo, en aquel momento estaban repletas de gente y eso que estábamos en plena pandemia.



De camino a nuestro próximo apartamento en la población de El Golfo, se encendió la luz de presión del neumático trastero izquierdo, paré en una gasolinera para comprobar la presión y oh sorpresa, tenia un hierro clavado en el neumático.
Como era viernes por la tarde y después de la experiencia en el Hierro, donde llamé a atención al cliente de Cicar y no contestó nadie porque era fin de semana, decidí buscarme la vida por mi cuenta, así que busque en Google algún taller cercano de reparación de neumáticos, encontré uno llamado Neumáticos Jorge Confortauto.

Por suerte estaba a unos 5 kilómetros, nos dirigimos rápidamente hacia el taller a pesar de que Google nos decía que estaría cerrado. Al llegar vimos que tenían una puerta lateral abierta y al preguntar nos dijeron que estaba cerrado, pero nos hicieron el gran favor de repararnos el pinchazo, pudiendo proseguir con nuestro camino previo pago de 10€, fue de agradecer que nos ayudaran.
El Golfo
Llegamos por fin a la población de El Golfo, nuestro campo base los siguientes días, situado en mitad del parque natural rodeado de mares de lava. El apartamento Sol & Mar estaba muy bien, quizás el único inconveniente es que no tenía vistas, daba a una calle estrecha, lo positivo era que estaba a una calle del paseo marítimo.


Al estar en el golfo la primera visita obligatoria fue el Charco de los Clicos también llamado el Charco Verde, el cual ha adquirido su tonalidad verdosa debido a un tipo de alga que vive en su interior y el nombre proviene una especie de bivalvos comestibles que recibían el nombre local de Clicos, junto al charco hay un par de playas de arena negra.

Para cenar nos decidimos por el Restaurante Bogavante, en el Golfo hay que ir temprano a cenar pues los restaurantes cierran a las 21h. algo inaudito en nuestro país, pero ellos lo justifican diciendo que solo vienen turistas para ver el Charco de los Clicos y después se van, así que por la noche no hay suficientes turistas para cenar.


Día 5 – Parque Nacional de Timanfaya | Volcán El Cuervo| Monumento al Campesino
Salimos bastante temprano, pasando primero por los Hervideros, unas cavidades en la roca que con el oleaje resopla por los orificios, pero en nuestro caso había mar calma.

Para posteriormente dirigirnos hacia la visita estrella de Lanzarote, el Parque Nacional de Timanfaya, es mejor ir a primera hora para evitar largas esperas, pues es donde se aglutinan la mayoría de visitantes de la isla.
Parque Nacional de Timanfaya
Un lugar que por más veces que lo visites te sigue impresionando, con grandes esplanadas de suelo volcánico de gran belleza que parece sacado de una película de ciencia ficción.

Cuando llegamos, ya habian unos 30 coches aparcados y un autobús turístico, así que sin dilación empezamos con el espectáculo programado, los chorros de agua que salen una vez la introducen en la tierra , las bolas de paja que arden al introducirlas bajo tierra y la barbacoa que funciona con energía geotérmica.






Nos subimos en una de las guaguas para realizar el recorrido de los volcanes de las Montañas de Fuego, donde pudimos contemplar el paisaje que dejaron la erupciones volcánicas de los años 1720, 1736 y 1824, una actividad imprescindible en cualquier visita a Lanzarote.





Ya con nuestro coche hicimos una breve parada en el Echadero de Camellos, donde se pueden hacer recorrido en dromedario por 12€, también hay un Museo y un pequeño bar donde nos compramos un bocadillo.



Paseo en camello por Timanfaya
Saliendo del parque nacional, pasamos por la Bodega La Geria para reservar una visita guiada para las cinco de la tarde que el sol no aprieta tanto.
Volcán El Cuervo
A pocos kilómetros se encuentra el Volcán El Cuervo, donde hicimos el Trekking circular de una hora y media aproximadamente.


Es una ruta interesante que nos llevó a través de una rotura lateral hasta el centro del cono del volcán, atravesando los mares de lava de múltiples tonalidades de ocre, con vistas a otros conos volcánicos y la Caldera Blanca al fondo, durante toda la ruta se dispone de varios paneles informativos.






Al salir fuimos a comer a San Bartolomé en el Bar El Moreno, comimos unos chips de morena y un solomillo de ternera, el bar no es muy allá, pero se come bien.



Monumento al Campesino
Tras la comida visitamos el Monumento al Campesino, obra de César Manrique, situado en mitad de la isla, es un homenaje al esfuerzo de los hombres y mujeres del campo lanzaroteño, otro sorprendente diseño del artista donde podemos encontrar zonas con artesanos, restaurantes y con una gran sala oculta bajo tierra para grandes banquetes.





Decidimos darnos un descanso y nos fuimos al apartamento a relajarnos pues faltaba todavía una hora para la visita a la bodega.
Bodega La Geria
A las 5 en punto de la tarde estábamos en la bodega de la Geria donde hicimos la visita guiada con su correspondiente degustación, pudimos observar que utilizan un sistema muy diferente al de la península en el cultivo de la vid.






En nuestro recorrido por el viñedo nos explicaron el cultivo de las vides a las que tienen que ocultar en hoyos rodeadas de muros de piedra para protegerlas del fuerte viento, pasando posteriormente por la bodega y finalizando en la tienda con una degustación. La duración de la visita fue de 45 minutos, el precio por persona es de 10€, realizando visitas de lunes a domingo. Aquí o dejo el enlace para reservar : https://www.lageria.com/
Puerto del Carmen
Finalizamos las visitas de la tarde en Puerto del Carmen para pasear por su paseo marítimo, sinceramente la población no nos gustó demasiado, supongo que por la noche habrá marcha, pero le faltaba encanto, en cambio el paseo desde la Playa Chica, pasando por la Playa Blanca hasta llegar a la Playa Grande, es muy agradable.

Cenamos en el Golfo, elegimos el Restaurante El Coletón, que es el único que cierra pasadas las 9 de la noche, los demás estaban todos a punto de cerrar y no cogían nuevos clientes, fue una muy buena opción pues comimos excelentemente.
Día 6 – Tinajo | Yaiza | San Bartolomé
Salinas del Janubio
A primera hora visitamos las Las Salinas del Janubio, que están a 10 kilómetros de el Golfo, en el municipio de Yaiza, para realizar las fotografías lo hicimos el mirador de las salinas, son unas antiguas salinas que todavía están en funcionamiento, siguiendo la carretera llegamos a la Playa del Janubio, de arena negra.




Tinajo
Como coincidió que era domingo, aprovechamos para visitar los mercadillos de la isla, primero fuimos al de Tinajo dedicado a los agricultores locales, no es muy grande pero interesante.

Aprovechamos para visitar también la Ermita de los Dolores, en cuyo interior se encuentra la imagen de la patrona de la localidad, según hemos leído, en el año 1735 cuando las lavas de las erupciones volcánicas, se aproximan a la población, la vecindad se reunió para realizar un oficio solicitando nombrar a la Virgen de Los Dolores mediadora de las erupciones, llevándola en procesión, lo que hizo que las lavas incandescentes se detuvieran justo antes de llegar al pueblo.



Nos trasladamos hasta la Villa de Teguise, donde hacen el mercado artesanal, aquí si se notaba muchísima más gente por todos lados, el acceso era restringido a causa del covid, tomándonos la temperatura a todos los que accedíamos, en él encontramos muchos productos artesanales y otros no tanto, nos compramos un recuerdo cada uno, unos pendientes mi pareja y una camiseta yo.

San Bartolomé
Teníamos cerca San Bartolomé, con su interesante centro histórico que alberga monumentos y sitios de interés. Una vez aparcamos cerca del centro, recorrimos sus callejuelas pasando frente al ayuntamiento.

Al llegar a la Iglesia Parroquial del siglo XVIII, tuvimos que esperar a que terminara la misa para poder visitarla, en su interior se encuentra un retablo de la misma época y unas tallas de San Andrés, también vimos el teatro y la Casa de la Cultura de Ajei .




La Casa del Mayor Guerra, declarada bien de interés cultural , fue la casa del gobernador militar de Lanzarote desde 1793 hasta 1808, el Coronel de Milicias Don Francisco Guerra Clavijo y Perdomo, quien mandó construir dicha casa en el año 1764, con los típicos rasgos de una casona señorial, con el escudo de armas de la familia en la entrada. Se puede visitar de martes a domingo de 9 a 14 horas.

Yaiza
Nos dirigimos hacia Yaiza para comer en el Asador 7 hojas “Casa Barriguita” en la calle Vista de Yaiza, 65. Comimos una fideuá caldosa deliciosa e inmensa, hay que ver las cantidades tan bestias que ponen, nos quedamos a reventar de tanta cantidad de fideuá, un restaurante muy recomendable.


Después de comer visitamos Yaiza, uno de los pueblos mejor conservados de la isla, visitamos la iglesia de Nuestra Señora de los Remedios, frente a esta nos encontramos con el ayuntamiento y recorrimos algunas de sus calles, pero como el calor estaba apretando decidimos dirigirnos hacia el Golfo.





Hicimos un descanso en el apartamento y cuando el sol aflojó un poco nos fuimos a Playa Blanca para pasear por su paseo marítimo desde el puerto hasta la Marina Rubicón ida y vuelta viendo la puesta de sol tras los volcanes.

Como estábamos todavia muy llenos de la fideuá , queríamos cenar ligero, decidimos ir a un bar llamado Yaiza Playa Blanca, donde nos comimos una tortilla a la francesa y nada más.
Día 7 – Fundación Cesar Manrique | Casa Manrique
Casa del palmeral
Último día en Lanzarote, por suerte este día era el primero que reabrían las Fundación Cesar Manrique y la Casa Manrique o Casa del palmeral, empezamos por la que teníamos más alejada, La Casa Manrique, ubicada en la población de Haría, en esta casa es donde vivió los últimos años antes del fatal accidente de circulación donde perdió la vida, cuando le chocó lateralmente un Jeep contra el Jaguar que él conducía.

Tal como reza en su nombre la Casa del palmeral está en mitad de un gran palmeral, las obras se iniciaron en 1986 adaptando una vivienda de labranza en ruinas, que se encontraba en una finca agrícola que había comprado en los años setenta, viviendo hasta el año 1992. La casa es, como casi todo lo que diseñaba él, preciosa, con grandes espacios blancos y un jardín de suelo volcánico con piscina.






Lástima que no dejaban hacer fotografías ni filmaciones del interior por lo que no os puedo enseñar ninguna foto, precisamente esta casa, sin ser tan espectacular como la de la fundación, la encontré mucho más personal, con múltiples pertenencías del artista incluido su estudio de trabajo situado al otro lado del patio, que lo dejaron tal y como quedó el día que falleció, con sus pinturas, cuadros a medio hacer y la bata colgada en el perchero.
Fundación Cesar Manrique
La Fundación Cesar Manrique se encuentra en la población de Tahíche, a una media hora de coche de la casa, en este edificio es donde vivió durante 20 años, hacía sus fiestas y recibía a una gran cantidad de invitados.

Está construida dentro de una colada de lava en una perfecta armonía con el entorno, fue proyectada por el propio César Manrique a su regreso de Nueva York, quedándose definitivamente a vivir en Lanzarote, tiene 3.000 metros cuadrados construidos y 30.000 metros cuadrados de solar, con una zona de piscina rodeada de vegetación y en la parte inferior aprovechó cinco burbujas volcánicas naturales que las comunicó entre si mediante túneles excavados en la lava, una auténtica virguería de casa.












En el museo se pueden contemplar tanto obras del propio César Manrique como de otros artistas como Miró, Picasso o Chillida.



Se puede visitar todos los días (festivos incluidos) de 10 a 15 h, Aquí os dejo el enlace : http://fcmanrique.org/inicio/?lang=es
Costa Teguise
Para comer y dado que celebrábamos el 35 aniversario de nuestra boda, elegimos el Restaurante Villa de Toledo en la localidad de Costa Teguise, con una magnífica terraza frente al mar.





Nos comimos un excelente arroz de bogavante acompañado de una botella de vino Vulcano blanco seco y para rematar de postre un delicioso helado de higo. Un restaurante muy recomendable. Aquí os dejo el enlace : https://restaurantevillatoledo.com/index.php/es/




Tras la copiosa comida dimos la visitas por terminadas, pasando otra vez por la salinas de Janubio y los Hervideros que estaban a pocos kilómetros del apartamento. El resto de la tarde la dedicamos a pasear por El Golfo y descansar. Al día siguiente, después de devolver el vehículo en la agencia de Cicar, regresamos hacia Barcelona con nuestro vuelo de Vueling.



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Tour en buggy por Guatiza y Mala
Paseo en catamarán desde Puerto del Carmen al atardecer
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